
Técnica no quirúrgica mediante la cual se suministran pequeñas cantidades de Dióxido de Carbono (CO2), que oxigenan los tejidos y estimulan una mejor circulación local para reducir problemas de flacidez, celulitis, estrías o grasa localizada.
¿Cómo se realiza?
- Se aplica de forma intradérmica, a través de micro-inyecciones estériles, conectadas a una máquina que regula el flujo del gas administrado.
- Se necesitan entre 8 y 10 sesiones como mínimo para poder observar cambios.
- La frecuencia entre sesiones, está sujeta a una previa evaluación para dosificar el tratamiento.
Beneficios:
- Estimulación de la circulación en la zona afectada.
- Promueve la formación de vasos sanguíneos.
- Mejora del aspectos de los tejidos.
